De mis varias visitas a la Sierra de Guara no podía faltar la excursión estrella, el Barranco de Mascún, catedral de escaladores.
En la entrada de Bierge cogemos la carretera que nos lleva a Rodellar, donde hice un alto en la Almunias de Rodellar donde hay hotel y albergue. Cené y dormí allí y hablando con el dueño preguntándole por la ruta me indicó que la hicera por «la Costera», que aunque con más pendiente, la subida era más corta.
Al día siguiente llegué al pueblo de Rodellar, dejé el coche en el parking de la entrada del pueblo, pues más adelante es difícil aparcar. Cogí la mochila y atravesé el pueblo por su calle principal que desemboca en un camino empedrado que nos lleva al barrio de la Honguera. Allí encontramos un panel informativo de las posibles rutas que se pueden hacer en el barranco de Mascún.
Tomamos la senda que poco después nos indica, en otro panel, la Ruta de la Virgen de Rodellar, en la que tardaríamos unos 30 min en ida y vuelta. Opté por seguir el sendero que desciende al fondo del barranco. Una vez en su lecho, giramos a la derecha remontando el curso del río. En este tramo existen multitud de vías de escalada, con gran cantidad de aficionados a ella. Al poco llegamos a la surgencia del Mascún, fuente permanente de agua que brota al exterior.
Vemos enfrente una cavidad, de las muchas que hay, llamada el Delfín. Remontamos el barranco hasta un punto en donde empieza la ruta circular. Por la izquierda Otín – Barranco de Andrebot (por aquí bajaré a la vuelta). Sigo por la derecha hasta llegar a dos formaciones rocosas, las más fotografiadas del barranco, la Cuca Bellosta y la Ciudadela.
Por la izquierda de ellas sigue la senda, llamada la Costera, con gran desnivel donde veremos la grandiosidad del barranco. Pasamos por los Quejigos de Otín y llegaremos al pueblo abandonado de Otín. Una vez allí, contemplando la soledad que lo invade todo veo la que fué su iglesia, la escuela… y que ahora son sólo ruinas.
Sigo caminando por la senda que lleva al dolmen megalítico de Losa Mora.
Inicio la bajada por el Barranco de Andrebot, veo la cueva a la izquierda y llego al punto de inicio de la ruta circular. Después, volviendo por el barranco, vi a la derecha escaladores que salían de una cueva, y como me quedaban fuerzas … subí por un senderillo hasta allí para hacer unas fotos.
Regresé al pueblo de Rodellar y desde allí a Bierge.
